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Otorgado por el Instituto Sanmartiniano de PERÚ
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Martes, 7 de agosto de 2018
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Cassani recibió Medalla Sanmartiniana en grado de Caballero  El Instituto Sanmartiniano del Perú, distinguió a la institución Honorable Cámara de Diputados de Corrientes con las “Palmas Sanmartinianas en el grado de Gran Oficial”; en tanto que al Presidente Pedro Cassani, con la Medalla Sanmartiana en grado de “Caballero”.
En la sesión del Instituto Sanmartiniano por el aniversario de la creación del “protectorado” del Gral José Francisco de San Martín, el Presidente de la Cámara de Diputados de Corrientes Dr. Pedro Cassani recibió la Medalla Sanmartiniana en grado de “Caballero”, en un acto presidido por el titular de esta institución Adolf Sobrevilla y demás integrantes.
Cabe recordar que el protectorado de San Martín fue el gobierno provisorio ejercido por San Martín tras la proclamación de la independencia en Lima, el sábado 28 de julio de 1821 sobre el territorio peruano entonces liberado del dominio virreinal.
En tanto que la institución Honorable Cámara de Diputados de Corrientes, por su parte, recibió las “Palmas Sanmartinianas en el grado de Gran Oficial”, las cuales están inspiradas en la “Orden del Sol” de Perú, siendo instituida por San Martín en Lima el 16 de diciembre de 1821 como premio a los “ciudadanos virtuosos” y a los “hombres beneméritos”.
El Instituto Sanmartiniano del Perú es la institución cívico-patriótica autónoma, sin fines de lucro, con personería jurídica y reconocida por el Estado Peruano, cuya finalidad esencial es rendir homenaje permanente al Libertador del Perú Don José de San Martín y Matorras y a los Próceres de la Independencia del Perú; mantener y exaltar el patriotismo y el espíritu cívico de los peruanos, fomentar estudios históricos sobre la vida y obra del Libertador San Martín, así como de la Gesta Emancipadora.
Su presidente actual es Adolf Sobrevilla, a quien Cassani agradeció el gesto, acotando: “la recibo en nombre de todos y cada uno de los correntinos, hermanos de tierra y sangre del Padre de nuestra patria, General Don José de San Martín”.
En su alocución, un emocionado Cassani agradeció a Dios, y al pueblo por el lugar que le toca estar, para agregar: “en mi vida política he tenido grandes momentos de alegría y otros tantos de sinsabores, pero eventos de esta naturaleza, llenan de sentido todo lo que uno hace. Corrientes es tierra de hombres fuertes, hombres cuyo espíritu no se dobla ante el enemigo. Tierra de héroes y de hombres que dieron su vida por la Patria. Tenemos el orgullo, y en esto no vamos a ser modestos, de decir que San Martín es NUESTRO. Lo hemos prestado a los pueblos hermanos, que gracias a la generosidad de nuestro prócer, hoy son naciones también libres. Pero San Martín es patrimonio del pueblo correntino”, sostuvo.
Párrafo aparte, mencionó que “San Martín conjuga en sus genes una raza con siglos de historia transmitidos por sus padres españoles y una sangre nueva al nacer en tierra americana y vivir en ella hasta los cinco años. La fuerza de la misión americana hace que San Martín elija el camino del hombre nuevo y tome de Europa la experiencia militar y política de sus veinte años en ese continente. Este período de formación profesional sella con fuego su ascetismo, su conciencia del deber y su vocación militar”.
“San Martín -continuó- eligió la idea de libertad y la patria americana como suelo apto para concretar ese ideal. La ética del servicio orienta esta etapa y, como en toda su vida, está presente la conciencia del deber y la respuesta al sentir interior. Debe liberar a América. Su sentido de vida es liberar y unir a los pueblos americanos y así cumple: cruza los Andes; libera Chile con bandera argentina, al Perú con bandera chilena y en el Perú funda una nueva nación dándole bandera propia.
Existe una actitud que prima en toda su trayectoria de liberación: no apropiarse del poder. En Chile cede el poder a O´ Higgins y en Perú, a Bolívar”, recordó.
Asimismo remarcó que “supo retirarse en el momento oportuno, utilizando el poder responsablemente, no compite por él y trasciende ambiciones personales. Por esta misma razón, de regreso a la Argentina, se aparta de los intereses sectoriales y de las divisiones políticas. Esta actitud de desapego por el poder ennoblece y libera su ser. Además, forma un arquetipo de hombre nuevo, en el pensamiento americano, que desafía el destino, lo cumple y logra la liberación interior. Los americanos, especialmente los argentinos, somos depositarios de esta herencia ética”.
“…San Martin fue ejemplo de persona, de líder, de soldado, de compañero, de amigo, de padre… Quiero manifestar mi profundo agradecimiento por el alto honor que para mí representa, ser condecorado con esta Medalla Sanmartiniana, que necesariamente trae a la memoria su gesta por la independencia de nuestra patria y de otras naciones sudamericanas, ejemplo preclaro y permanente en las luchas de los pueblos de la Patria Grande, ayer, hoy y mañana, por la soberanía, la democracia y la libertad”, concluyó.
TIERRA DE YAPEYÚ Y CUADROS
Los legisladores, encabezados por Pedro Cassani, también entregaron un cofre con tierra de Yapeyú, al Museo Fortaleza Real Felipe; y cuadros del Padre de la Patria, al municipio de Pueblo Libre.
El museo citado es una dependencia del Ejército del Perú encargada de resguardar y conservar los objetos que fueron partícipes en los conflictos de la independencia del Perú en defensa de la Patria y su Soberanía.
Es una de las pocas obras de arquitectura militar que existen en el Perú y es la más grande que construyeron los españoles en América.
Su nombre fue elegido en honor del rey Felipe V de la Casa de Borbón, que había fallecido en 1746. Posteriormente fue renombrada por José de San Martín como «Castillo de la Independencia» al iniciarse la etapa republicana, retomando su nombre original en 1925.
El municipio de Pueblo Libre, se llamó inicialmente Santa María Magdalena de Chacalea, que es el nombre de la Doctrina de la Orden Franciscana, que construyó una iglesia en terreno donado por el Cacique Gonzalo Taulichusco.
El 8 de julio de 1821, el libertador José de San Martín la bautiza como Pueblo Libre en reconocimiento al patriotismo de sus moradores.
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