|
El caso posee ribetes mafiosos. El dueño del campo manejaba plantaciones de yerba y negocios ganaderos
|
Martes, 8 de diciembre de 2015
|
Doble crimen en una estancia correntina  Un empresario yerbatero de 74 años fue torturado y baleado por un grupo de delincuentes, que también asesinó de un disparo en la nuca al presunto entregador. Sucedió en un campo de la localidad de Mercedes. A uno lo mataron en estado de indefensión y al otro a traición. Las víctimas fueron un empresario yerbatero de la localidad correntina de Mercedes y un paisano que actuó como entregador. Descartan el móvil del robo y apuntan a una venganza
Según los investigadores, el crimen del empresario Héctor Sartori, de 74 años, fue cometido por una banda de cuatro delincuentes que lo sorprendió cuando realizaba trabajos rurales junto a un capataz y el hijo de este, menor de edad, quienes resultaron ilesos.
Fuentes policiales informaron a Télam que el crimen de Sartori, propietario de la firma yerbatera "Cuarto de Milla" y de establecimientos ganaderos, fue descubierto el domingo a la tarde, en un potrero de la estancia Santa Teresa, ubicada en el kilómetro 77 de la Ruta Provincial 123, a la altura de Mercedes.
El comisario de esa localidad, Marcos Daniel Toledo, contó que ese día a las 19:30 "se presentó en seccional 1º un ciudadano de apellido Cabral, capataz de una estancia propiedad del señor Sartori, y manifestó que habían sido atacados por delincuentes en un puesto cercano a la estancia".
Ante esa denuncia, una comisión policial fue hasta el lugar y halló los dos cadáveres a pocos metros de distancia uno del otro.
El cuerpo de Sartori estaba maniatado con alambre fino, amordazado, sujetado a los postes de un potrero del predio rural y presentaba un balazo en la cabeza y golpes.
"Llama poderosamente la atención el ensañamiento con Sartori, quien evidentemente no ofreció resistencia", indicó el comisario Toledo, quien no descartó que al empresario "lo hayan torturado".
El jefe policial señaló que el otro hombre asesinado, que no fue identificado, presentaba un disparo en la nuca con orificio de salida en la sien derecha y también un corte profundo en el cuero cabelludo a la altura de la oreja derecha.
"Nos pareció muy raro porque Sartori no poseía armas de fuego", sostuvo el comisario Toledo, que consideró que el sospechoso muerto "puede ser del lugar y que el resto de la banda lo haya utilizado como guía para llegar" hasta la estancia.
Consultado sobre el móvil del crimen, el jefe policial respondió que los delincuentes "no se llevaron nada" y aclaró: "Estamos en plena etapa investigativa. No podemos cerrar ninguna hipótesis por el momento."
Según se pudo reconstruir en base al testimonio del capataz, fueron cuatro personas, tres de ellas armadas con pistolas 9 milímetros, que arribaron al puesto rural alrededor de las 16, en un auto de alta gama color oscuro y lo redujeron a él, a su hijo y al empresario.
De acuerdo al relato del capataz, los movimientos sospechosos habían comenzado alrededor de las 13:30, cuando él terminaba de almorzar y dos hombres se presentaron en la estancia y le preguntaron si tenían algo para vender, a lo que les respondió que no y los visitantes se retiraron.
Luego de ese episodio, Sartori, el capataz y su hijo salieron del casco de la estancia alrededor de las 15 para ir a arreglar un corral en el puesto cercano donde finalmente fueron atacados.
"Según el sobreviviente, (los atacantes) no hablaron mucho y en lo poco que hablaron no tenían un tono definido", sostuvo un vocero.
|
