Salud Pública
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Miércoles, 16 de diciembre de 2015
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Ordenamiento ambiental: insisten en que es fundamental para evitar enfermedades vectoriales Desde la cartera sanitaria provincial insisten las medidas a tener en cuenta para evitar la reproducción de vectores que trasmiten enfermedades como Dengue, Leishmanisis, Chikunguña y Zika. Es primordial eliminar todos los recipientes que acumulen agua y residuos orgánicos. Asimismo, se recuerda llevar repelente a las personas que van a viajar a la zona del Caribe, Centroamérica y América del Sur; donde se han registrado casos de Zika. Teniendo en cuenta que los mosquitos trasmisores de Leishmaniasis, Dengue, Chikunguña y Zika pueden reproducirse en épocas de altas temperaturas, y que Corrientes es una provincia en la que está presente el Aedes aegypti, desde la Dirección de Epidemiología de la Provincia mantienen la vigilancia epidemiológica, y piden a la población tener en cuenta las recomendaciones para evitar estas enfermedades. Entre ellas se solicita mantener el ordenamiento ambiental, el uso de repelentes y estar atentos a posibles síntomas. La directora de Epidemiología de la Provincia, Natalia Montiel, especificó que “es necesaria la responsabilidad de la comunidad y de los municipios en el ordenamiento ambiental para las patologías transmitidas por vectores. Es fundamental estar atentos, ya que estamos en la época clave donde tenemos que insistir en mantener los patios limpios, como así también los alrededores del domicilio para prevenir enfermedades vectoriales como son la Leishmaniasis, el Dengue, la Chikunguña y el Zika”. Continuó detallando, “tengamos en cuenta que el clima de humedad, la lluvia, la vegetación, y el calor hacen que favorezca el desarrollo de una nueva familia de vectores, y que Corrientes es una provincia en la que está presente el Aedes aegypti. Por ello, hay que enfocarse en controlar al vector, si no tenemos el mosquito, no vamos a tener estas enfermedades porque es el que las transmite”. “La diferencia se da en que cada una de las patologías tiene la particularidad de un periodo de incubación más corto o más largo, pero básicamente todas se comportan como un síndrome febril inespecífico. Con presencia de fiebre alta dolores de cabeza, decaimiento en general, y dolores musculares y articulares; en el caso del Zika tienen también otras complicaciones como ser conjuntivitis no purulenta o síntomas neurológicos”, puntualizó Natalia Montiel. Con respecto al Zika en particular recordó que “si bien no hay circulación en la provincia, de igual manera hay que tener en cuenta que si vamos a viajar a lugares donde están siendo notificados casos como en el Caribe, en Centroamérica y en América del Sur; hay que prever llevar repelente, y preferentemente ropas holgadas que cubran el torso y los tobillos, sobre todo en horario de la primera mañana y en el atardecer que es cuando más movimiento de los vectores hay”.
ZIKA, DENGUE Y CHIKUNGUÑA
La infección por zika es una enfermedad causada por un virus filogenéticamente muy cercano a los virus dengue y de la fiebre amarilla, que se transmite por la picadura de mosquitos del género Aedes, tanto en un ámbito urbano como selvático. La fiebre del zika consiste en fiebre leve, sarpullido (principalmente maculo-papular), dolor de cabeza, dolor en las articulaciones, dolor muscular, malestar general y conjuntivitis no purulenta que ocurre entre tres a doce días después de la picadura del mosquito vector, pudiendo en algunos casos, producir complicaciones neurológicas. La transmisión de los virus del dengue se interrumpió en gran parte de la región de las Américas en la década de 1970 tras una campaña de erradicación del Aedes aegypti. Sin embargo, por una suma de condiciones y factores, el vector se reintrodujo en casi toda la región produciendo brotes esporádicos y de variada envergadura en el Caribe, en Centroamérica y en América del Sur. Estas zonas geográficas se encuentran en la actualidad en situación hiperendémica con transmisión autóctona en casi todos los países. La introducción del virus de chikunguña en las Américas, hacia fines de 2013, supuso un reto para la vigilancia epidemiológica y los servicios de salud de la región. Esa enfermedad emergente en la región, transmitida también por la picadura del mosquito Aedes aegypti, registró luego brotes en Brasil, Bolivia y Paraguay. Hasta septiembre de 2015, se notificaron más de un millón y medio de casos y más de 200 muertes asociadas a la fiebre chikunguña.
LEISHMANIASIS CUTÁNEA
La directora de Epidemiología Natalia Montiel se refirió a los casos de Leishmaniasis Cutánea indicando que “seguimos trabajando en esta patología, actualmente hay registrados 66 casos de pacientes que están evolucionando favorablemente, están bajo tratamiento que es provisto por el Ministerio de Salud de la Provincia. Para poder realizar el tratamiento se requieren estudios previos para el control y seguimiento de los pacientes durante, posteriormente y hasta su alta médica”. (Datos del Ministerio de Salud de la Nación.)
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