Roma
|
Viernes, 18 de diciembre de 2015
|
Nuevo gesto de caridad del papa Francisco  Para hacer entender el significado del Jubileo de la Misericordia, el Sumo Pontífice abrió la Puerta Santa de la Caridad de un hostal de Cáritas en Termini. En un nuevo gesto para hacer entender el significado del Jubileo de la Misericordia, el papa Francisco abrió esta tarde la Puerta Santa de la Caridad de un hostal que Cáritas tiene al lado de la estación ferroviaria de Termini.
Allí, donde suelen recibir acogida cientos de miles de sin techo, Francisco llamó a los romanos a abrir su corazón, a evitar lujo, riqueza y poder, sino a estar cerca de los más pobres, los enfermos, los presos, porque son ellos quienes tienen "la llave" de la salvación.
Se trata del primer gesto simbólico de este tipo que Francisco cumplirá un viernes de cada mes a lo largo del Jubileo de la Misericordia. Como explicó monseñor Rino Fisichella, prefecto de la Congregación para la Nueva Evangelización de los Pueblos y el organizador de este Año Santo extraordinario, serán gestos a veces privados, que serán comunicados a último momento, como la visita a un enfermo o a un preso.
clic aqui En una estación Termini blindada para la ocasión, luego de abrir la Puerta Santa de la Caridad del hostal "Don Luigi di Liegro", de la Via Marsala, el Papa celebró misa. En una homilía pronunciada desde el corazón, recordó que para salvar a la humanidad Jesús no eligió "una gran ciudad de un gran imperio, no eligió una princesa o condesa como madre, ni un palacio de lujo".
"Si tú quieres encontrar a Dios, búscalo en la humildad, en la pobreza, búscalo donde Él está escondido: en los necesitados, en los más necesitados, en los hambrientos, en los detenidos", dijo. Destacó, además, que "la entrada al cielo no se paga con dinero". "Jesús no dirá 'tu, ven conmigo porque hiciste muchas ofertas a la Iglesia, tu has estudiado mucho, tienes muchos honores, ven al Cielo. No. Los honores no abren la puerta del Cielo. ¿Qué nos dirá Jesús para abrirnos la puerta al Cielo? 'Estaba hambriento y me diste de comer, estaba sin techo y me diste una casa; estaba enfermo y viniste a verme; estaba en la cárcel y viniste a visitarme'. Jesús está en la humildad", explicó.
"El amor de Jesús es grande. Por esto hoy, al abrir esta Puerta Santa, quisiera que el Espíritu Santo abriera el corazón de todos los romanos, y les hiciera ver cuál es el camino de la salvación. No es el lujo, no es el camino de las grandes riquezas, no es el camino del poder. Es el camino de la humildad. Y los más pobres, los enfermos, los detenidos -los más pecadores, si se arrepienten-, nos precederán en el Cielo. Ellos tienen la llave", indicó. "Quien hace la caridad es aquel que se deja abrazar por la misericordia del Señor", agregó.
Como siempre el Papa saludó, uno por uno, con mucho cariño, a todos los presentes. Después de rezar en la capilla del hostal y de un último saludo a los fieles que lo esperaban afuera, regresó al Vaticano con una escolta mínima, a bordo de su humilde Ford Focus azul.
|