Miles de argentinos viajan al país vecino este verano. La fuerte devaluación del real favorece el cambio.
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Miércoles, 6 de enero de 2016
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Argentinos en Brasil: qué llevar y cómo conviene pagar En Brasil anticipan la llegada de miles de argentinos esta temporada. La fuerte devaluación del real es un gran incentivo. Los precios ahora son mucho más convenientes que años atrás. Tras la apertura del mercado cambiario, la duda de muchos de los que se van ahora es qué moneda conviene llevar y cómo afrontar los gastos allá.
Las opciones son pagar con tarjeta de débito o crédito; llevar reales; llevar dólares; llevar pesos o sacar de un cajero automático en el país vecino, si es que tu banco te lo permite.
Algunas alternativas son más convenientes que otras.
Llevar dólares. Comprar dólares en Córdoba y llevarlos a Brasil es una de las alternativas más convenientes. Desde el 17 de diciembre, cualquier persona puede comprar dólares en un banco o casa de cambio.
Ya no hay diferentes cotizaciones según el destino que se le vaya a dar a la moneda, aunque sí varían entre banco y banco y también en relación a las casas de cambio –los bancos tienen mejores precios. Aunque son pocos centavos, conviene verificar bien el precio antes de comprar–.
Con efectivo, se pueden comprar un máximo de 500 dólares. El resto, a través de una cuenta bancaria.
Si se toma como referencia la cotización del dólar de estos días, entre 13,50 y 14 pesos, como cerró ayer, y se cambia allá a 3,80 reales, entonces un real equivaldrá a unos 3,60 pesos.
Pagar con la tarjeta de débito. En Brasil, el uso del débito está mucho más difundido que en Argentina, por lo que es posible pagar con tarjeta casi todos los gastos, incluso hasta en puestos de las playas.
El cambio es similar al que resulta de llevar y cambiar dólares, ya que los gastos se transforman a la cotización oficial de ese momento.
Pagar con la tarjeta de crédito. La diferencia con la tarjeta de débito es que los gastos aparecen en dólares con el resumen posterior a la compra y se pagan al tipo de cambio del día del vencimiento.
Esta modalidad de pago, entonces, no permite saber con certeza cuánto saldrán las cosas, ya que el tipo de cambio fluctúa todas las semanas.
Para usar tarjetas en el extranjero, ya sea de débito o crédito, algunos bancos requieren una autorización previa que se hace por teléfono o home banking , dependiendo de la entidad.
Llevar reales. En una de las casas de cambio más grandes de Córdoba, el real ronda los 5,70 pesos estos días. No es una opción conveniente, salvo para asegurar el pago de los primeros gastos cuando se llega a destino.
Por lo general, los bancos no tienen reales, salvo los grandes como el Nación.
Llevar pesos. Llevar pesos tampoco es un buen negocio. No los aceptan en cualquier lugar y, en caso de hacerlo, el costo es bastante elevado.
Sacar de un cajero. En cuanto al cambio, es similar al de pagar con dólares o débito, aunque cada banco cobra una comisión que lo termina encareciendo.
Además, establece un límite de extracción diario, que en algunos casos es de mil pesos argentinos.
Según la experiencia de viajeros, algunos han podido retirar dinero de cajeros automáticos de Brasil y a otros les aparece un aviso que dice que no es posible porque no hay convenio con su banco.
Más de dos millones de argentinos pasarán sus vacaciones en Brasil, según el ente brasileño de Turismo (Embratur).
Algunos precios Para comer. En Río de Janeiro, una pizza para 12 personas cuesta unos 50 reales, mientras que un menú económico tiene un valor de entre 25 y 30 reales. Una gaseosa de dos litros está en unos ocho reales y la lata de cerveza en la playa, en seis reales. En un súper, la misma lata se puede conseguir pero no mucho más barata: cinco reales.
Para salir. Una entrada al boliche cuesta entre 60 y 80 reales en Río de Janeiro. Adentro, los tragos están entre 22 y 25 reales.
Para moverse. El metro en Río de Janeiro cuesta 3,70 y el colectivo, 3,80 reales. El litro de nafta vale entre 3,59 y 3,70 reales, según el lugar y la estación de servicio.
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