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Fútbol internacional
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Jueves, 10 de marzo de 2016
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Liverpool golpeó a Manchester United en los octavos de final de la Europa League El partido más interesante de los octavos de final de la Europa League fue el que protagonizaron Liverpool y Manchester United en Anfield. El clásico inglés se llevó todas las miradas del segundo torneo más importante del Viejo Continente. Como es habitual en este tipo de encuentros, los protagonistas salieron al campo con los dientes apretados, y el temor a la derrota atentó contra el espectáculo. Tal es así, que recién a los 19 minutos el equipo de Jürgen Klopp se puso en ventaja a través de un polémico penal. Una supuesta infracción de Memphis Depay sobre Nathaniel Clyne llevó a Carlos Velasco a sancionar la pena máxima. Con mucha tranquilidad, Daniel Sturridge intercambió el error del español por gol y festejó el 1 a 0.
La diferencia pudo ser mayor si Philippe Coutinho no exponía sus inseguridades adentro del área chica. El brasileño recibió en soledad y ante un David De Gea vencido, pero sus dudas le permitieron al arquero recuperarse y mantener con vida al conjunto de Louis van Gaal. A partir del error arbitral, el dueño de casa se mostró con confianza para superar a su adversario.
En el complemento el cotejo continuó bajo la misma sintonía, y un intento de media distancia del oriundo de Río de Janeiro volvió a exigir al ex Atlético Madrid, quien a mano cambiada evitó la segunda caída de su valla. Los Reds justificaban su victoria por la individualidad de sus intérpretes.
Sobre la media hora de la segunda etapa, un grosero error de Michael Carrick le permitió al Liverpool estirar la ventaja. El pésimo despeje del reemplazante de Marcus Rashford le dejó servido el balón a Adam Lallana, quien habilitó a Roberto Firmino para que se establezca el justo 2 a 0. Si bien la diferencia pudo ser mayor, los de Klopp deberán resolver la llave el próximo jueves en Old Trafford.
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