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Denuncia por desmanejos en Paso de los Libres
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Miércoles, 4 de mayo de 2016
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Elevan a juicio una investigación por fraude en una sucursal del Banco Nación  En la edición del miércoles del programa “Es lo que hay” que se emite por AM 8.40 entrevistamos a un colega de la capital correntina. Marcelo Burchiski periodista y columnista de Diario Norte nos adelantó lo que será publicado en su edición de mañana, sobre la causa del Banco Nación de nuestra ciudad.
Nueve ex empleados del Banco de la Nación Argentina de la sucursal Paso de los Libres fueron procesados por supuestamente haberse quedado con dinero que debían ser cobrados por clientes de esa entidad bancaria en concepto de retornos de impuestos al cheque. Los administrativos fueron imputados por los delitos de “comisión de fraude en perjuicio de la administración pública en concurso ideal con los delitos de sustracción de caudales confiados por razón de su cargo y abuso de autoridad, y violación de los deberes de funcionario público”.
La denuncia fue radicada por el representante legal de la sucursal del Banco de la Nación Argentina, que realizó una investigación interna supuestamente después que clientes dieran a conocer perjuicios en su contra por las maniobras. Luego de esto, el fiscal Benito Pont puso en marcha una investigación que terminó con un pedido de elevación a juicio y solicitó allanamientos. Las pruebas obtenidas por el funcionario del Ministerio Público posibilitaron que el pasado 29 de marzo, la jueza Cristina Pozzer Penzo estableciera la elevación a debate de la causa al Tribunal Oral Federal de Corrientes.
La magistrada remitió la causa luego de considerar terminada la investigación judicial que llevó adelante la Fiscalía Federal de Paso de los Libres, en la que se detectó que “se habría llevado a cabo una operativa irregular” en la sucursal bancaria, “comprometiendo una gran cantidad de operaciones e involucrando a varias cuentas corriente con una matriz común consistente en percibir reintegros de impuesto a la ley 25.413”. Las maniobras se habrían realizado entre 2007 y 2012 “sin que existan los débitos o descuentos previos en las cuentas además de no abonarse en efectivo en la mayor parte de las operaciones auditadas y no acreditarse los importes en las cuentas presuntamente acreedoras”.
En el contexto de esos desmanejos, “también hubo inexistencia de comprobantes que permitieran esclarecer quiénes recibieron el dinero”. Los cobros, según fuentes judiciales, fueron “por importantes sumas”, pero “faltando en su mayoría comprobantes físicos”.
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