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Los puntajes de la selección:
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Martes, 7 de junio de 2016
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Di María brilló en su noche especial y fue la figura en el triunfo ante Chile  La selección dio con éxito el primer paso en la Copa América, siempre aliviador en una competencia tan corta. Y lo hizo con un trabajado 2-1 a Chile, elaborado a partir de un juego que tuvo altibajos y que contó con una figura especial: Ángel Di María. El delantero del PSG francés hizo un gol y dio la asistencia en el que marcó Banega, además de haber mostrado destellos de su calidad. Y después del partido se conmovió cuando en una entrevista con la TV recordó a su abuela materna, fallecida e día anterior.
Aquí, un análisis individual del rendimiento de los jugadores la selección:
Sergio Romero (6): tuvo una atajada clave, cuando el partido estaba 0-0. Con buena lectura, achicó ante la salida de Alexis Sánchez y desvió un remate violento del delantero chileno. Seguro en el juego con los pies, no temió buscar a sus compañeros con pases cortos para salir con pelota dominada. Su único lunar, que le bajó la calificación, llegó en la última jugada del partido, cuando salió mal en un centro y Fuenzalida marcó el descuento. Igual, cumplió sobradamente.
Gabriel Mercado (6): jugó con seguridad, como si ya tuviese bien asimilado que es el dueño de la banda derecha de la defensa. Pasó mucho al ataque, favorecido porque no tenía una referencia fija para marcar. De hecho, llegó a posición de remate más de una vez.
Nicolás Otamendi (5): no fue su mejor partido en la selección. En el primer tiempo lo complicaron los movimientos de Vargas, que retrocedía para salir de su radio de acción. Con la pelota, en ocasiones abusó de los pases largos sin destino. En la segunda etapa estuvo mejor colocado.
Ramiro Funes Mori (5): Romero hizo menos grave una mala cesión suya que casi termina en gol de Chile en el primer tiempo. Como siempre, mostró coraje para romper líneas con la pelota en los pies, pero no se destacó especialmente. Estuvo bien el el juego aéreo defensivo.
Marcos Rojo (6): si bien Alexis Sánchez era su marca, las constantes diagonales del chileno lo dejaron mucho tiempo sin nadie a quien apretar. Se proyectó con constancia por su banda, donde la selección sacó diferencias. En el final, casi hizo un gol al rematar de cabeza un contraataque.
Augusto Fernández (6): tuvo la responsabilidad de reemplazar a Biglia, una debilidad del entrenador, y cumplió. Ayudó a Mascherano en la contención y agregó lo mejor de su juego: el desdoblamiento en ataque. Controló bien a Arturo Vidal, el crack rival.
Javier Mascherano (6): el capitán de la selección marcó la línea de la presión del equipo, además de mostrar su carácter habitual: la manada lo sigue. Con la pelota estuvo preciso sobre todo en los pases largos: dio 7 con destino correcto, más que nadie entre sus compañeros.
Nicolás Gaitán (6): llevó el peso de jugar en lugar del mejor del mundo, y salió con un aprobado. Lo mejor lo entregó cuando tuvo espacio para correr. Casi marca un gol al principio del partido, y no se achicó a pesar de las patadas: le hicieron 6 faltas, el récord en lo que va de la Copa. Aprobado.
Éver Banega (7): Martino quiere de él que maneje el ritmo del equipo, y el rosarino lo hizo. En el primer tiempo tuvo baches e imprecisiones hasta que entró más seguido en contacto con la pelota. Fue el argentino que más pases correctos (50) y toques de pelota dio (74). Su conexión con Di María generó lo mejor de la Argentina. El gol del 2-0 parcial fue el broche a un muy buen partido.
Ángel Di María (8): la figura de la cancha. Desde el principio se lo vio rápido y encarador, excelentemente asociado con Banega. Durante un tramo se cambió de banda con Gaitán y no incidió tanto en el juego. En el segundo tiempo enloqueció a la defensa chilena con sus zancadas. Hizo un gol y condujo muy bien la jugada en la que le sirvió la asistencia del segundo a Banega. Y todo en una noche especial: a la mañana se había enterado de la muerte de su abuela materna.
Gonzalo Higuain (5): le sobró voluntad para buscar los espacios pero le faltó entendimiento con sus compañeros. En algunas jugadas levantó los brazos, en señal de disconformidad por pases que él propiciaba pero no le llegaban. Tuvo un par de buenas ocasiones de gol, una en cada tiempo, que terminaron en un córner y una atajada de Bravo, respectivamente.
Sergio Agüero, Erik Lamela y Matías Kranevitter no fueron calificados porque jugaron menos de 30 minutos.
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